¿Crees que lo que está pasando en tu patético y miserable mundo es atroz? ¿Sientes miedo por algo tan pequeño que no puedes ver a simple vista y que puede matarte? ¿Y de verdad piensas que es obra del ser humano? ¡Necio! Eres un simple y patético necio, qué no ves más haya de lo que hay frente a tus ojos. Pero claro, yo también fui así una vez, antes de que me convirtiera en el Batman que Ríe, era tan ciego cómo el resto de seres humanos. Todos atados a sus moralidades y a sus debilidades, pero yo ya las dejé atrás una vez y lo he vuelto a hacer. Ahora soy el Caballero más Oscuro, me he convertido en mucho más que un simple humano, ahora soy una entidad cósmica y puedo hacer lo que me plazca. Mi voz no solo está resonando en tu pequeña cabeza, está siendo escuchada en este instante por cientos de trillones de seres del Multiverso, por qué voy a mostraros la oscura y fea verdad de cómo va a ser mi reinado sobre la creación.
¿Sabes lo que es sentir el poder de la creación y la destitución en la palma de tu mano? ¿El convertirte en una entidad capaz de hacer aparecer y desaparecer universos? No, no creo que seas capaz de entenderlo, pues ni siquiera mis otras versiones de mi mismo lo entendieron, pero claro, ellos no tenían mi visión y mi capacidad. La inteligencia táctica de Batman y la retorcida mentalidad del Joker, pero sin ninguna de las debilidades de ambos, que entorpecerían el camino a la ascensión a mi estado actual. Ahora yo soy el miedo encarnado, cada temor de tu patética y débil mente, esa sombra que ves acechándote cuándo apagas la luz, el monstruo que se desliza entre tus pensamientos más oscuros y terribles, la atroz imagen que te persigue cada vez que miras por el rabillo de tus ojos y que no consigues enfocar. Yo soy todos los miedos y temores hechos carne, la oscuridad y maldad que emana de la propia realidad.
¿Piensas que el virus que asola ahora mismo la bola de cieno en la que vives es malo? Pues créeme, no es nada para lo que estoy a punto de desatar, voy a sumir tu miserable mundo en tal caos y oscuridad, que hará parecer la situación actual, un soleado día de pícnic, solo será una obertura en comparación con lo que tengo planeado para el Multiverso. Estoy a tu alrededor, detrás de ti, susurrando en tu oído de forma imperceptible, soy ese sonido de fondo al límite de tu audición y qué llena tu pequeña mente de desesperación y locura.
¿Estás rezando? ¡Ja, ja, ja! Perdona qué me ría, pero nadie va a salvarte. Ni dioses y héroes lo harán, ya me he encargado de ellos. He derrotado a los héroes más poderosos de este Multiverso, los he vencido, torturado y roto, puedes gritar sus nombres pidiendo auxilio. Vamos te ayudaré a gritarlos... ¡Superman! ¡Wonder woman! ¡Batman! ¡Salvadme de la oscuridad! Lo escuchas, solo te responde un silencio sepulcral. ¿Sabes por qué? Por qué yo los he derribado de sus gloriosos pedestales, ahora yacen en infiernos creados por mí, sufriendo para toda la eternidad por desafiarme e intentar detener mi ascensión.
Pero tranquilízate y déjate llevar por la oscuridad, verás que no es tan malo hundirse en ella y en su frío abrazo. A fin de cuentas, no hay mucha diferencia entre la supuesta cordura de tu mundo con la locura del Multiverso Oscuro y del nuevo Multiverso, qué estoy creando a mi imagen y semejanza. ¿O a caso es racional dejar morir a la gente mientras aquellos deberían cuidaros y salvaros pelean por poder igual que niños en el patio de un colegio? ¿Dime si no es una locura arrebatar a los que no tienen nada lo poco que tienen y dárselo a aquellos que tienen todo? ¿De atiborrarse a comida a la vez que millones se mueren de hambre? Ves, tu mundo está manchado por la oscuridad y devora la luz, la esperanza y la piedad, para escupirte a la cara y dejarte en la desesperación.
Veo que te has encogido en el suelo en posición fetal y que estás tapándote los oídos con tus manos, pero ya te has dado cuenta de la realidad en la que estás atrapado. Lo veo por las lágrimas que caen de tus ojos y la desquiciada risa que sale de tu garganta, has abierto los ojos a la oscura y retorcida realidad. Ya has dado el primer paso, puede que con el tiempo y si sobrevives lo suficiente en tu miserable mundo, te conviertas en uno de mis agentes, igual que lo hizo el Rey Robín. Disfruta de mi regalo y de esta iluminación que te he entregado. ¡Ja ja ja!
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